Los 9 mejores consejos para vender las acciones

Los escenarios donde debes vender tus acciones en la bolsa

Si hay alguna operación de vital importancia para determinar el éxito de tu inversión, esa no será otra que las ventas que desarrolles en los mercados bursátiles. Y especialmente será muy importante, ya no solamente para optimizar la inversión, sino para proteger tus ahorros ante  escenarios especialmente desfavorables para tus intereses. Deberás conocer el momento en el que ejecutar tu orden de venta, y bajo qué condiciones.

Con toda seguridad que la diferencia de aplicar una óptima venta a una que no lo es será enorme, y habrá muchos euros en juego, que no deberás perdonarlos bajo ninguna circunstancia. Seguramente que más de una vez en tu historial como pequeño inversor te habrás planteado el por qué no ejecutaste esta orden, y de esta manera te habrías ahorrado muchos disgustos por el cambio. A partir de estos momentos ya no tendrás excusas para repetir esta desagradable situación.

La primera recomendación para desarrollar con éxito tus operaciones en los mercados de renta variable es conocer en qué momento, y bajo qué situaciones tienes que vender tus acciones en las plazas bursátiles. En unos casos, será sencillamente para cerrar las operaciones y disfrutar de las plusvalías generadas desde tu operación. Pero en otros casos será algo más complicado, y tendrá como principal objetivo proteger el capital invertido, incluso evitar que las pérdidas se agudicen y se instalen definitivamente durante las próximas sesiones bursátiles.

No obstante, esta decisión que será muy personal, dependerá de otras variables que no están vinculadas con los mercados financieros, ni mucho menos con la cotización de las acciones. Por un lado, del perfil que presentes como inversor minorista. Si eres agresivo, conservador o intermedio determinará en cierta forma la orden de venta. Al igual que el plazo al que dirijas tu inversión: corto, medio o largo. En función de todos estos factores, y algunos otros que encontrarás en este artículo, deberás desarrollar tus ventas en los mercados de una forma u otra

Para ayudarte a elaborar una estrategia de inversión correcta, no habrá más remedio que sigas una serie de pautas de actuación que te serán muy útiles para cada vez que plantees el cierre de las operaciones. Además, no te costará mucho aplicarlas, ya que están habilitadas para toda clase de inversores.

Algunas puede que las intuyas, o incluso las hayas aplicado alguna vez en tu vida. Pero seguramente que otras te serán ajenas a tu comportamiento habitual, pero que podrán sacarte de más de un apuro en tus relaciones con los mercados de renta variable. Incluso desde planteamientos ciertamente originales, y que hasta desconocías.

Primera clave: ajustarte a las resistencias

Las resistencias son niveles para considerar la venta de las acciones

El primer punto de referencia para ejecutar las órdenes de venta es cerrar ante la aproximación de algún nivel importante de resistencia en las cotizaciones. Normalmente detendrán la tendencia alcista de los valores afectados, y que incluso podría ser la señal para emprender importantes correcciones desde estos niveles. No obstante, si superan las resistencias el potencial de revalorización es enorme. Aunque no conviene que arriesgues en exceso, y deberás decantarte por aplicar las ventas para disfrutar de las plusvalías conseguidas.

Asimismo, los soportes son otros niveles de gran importancia para tu inversión. No en vano, cuando son vulnerados, serán la excusa perfecta para que cierres las operaciones rápidamente. A no ser que te expongas a que las pérdidas se acumulen en tu cartera de inversión de forma definitiva. De ahí la importancia para que respetes estos niveles que presentan las cotizaciones, y en función de ellos formalices tus ventas en los mercados de renta variable.

Segunda clave: ante necesidades de liquidez

Si tu inversión está generando beneficios, y por cualquier circunstancia, necesitas de liquidez para afrontar algunos gastos personales: deudas ante terceros, pago de facturas, o financiar el próximo viajes junto a tu familia, no debes dejar que pase la ocasión y vende tus acciones. No hay que tratar de exprimir al máximo las plusvalías que puedan generarse, porque cualquier contratiempo en los mercados financieros puede dar al traste con tus beneficios en la bolsa.

Tercera clave: después de grandes revalorizaciones

Cuando las cotizaciones lleguen a niveles de resistencias será momento de valorar sus ventas

En un escenario en que tus acciones se han revalorizado como consecuencia de una prolongada tendencia alcista, será uno de los momentos en que deberás plantarte cerrar las operaciones. No en vano, te arriesgas a que las acciones tiendan a corregir sus precios, incluso de forma muy acusada. Hasta el punto de limitar, o hasta anular, parte de tus ganancias. No merece la pena seguir con posiciones abiertas en los mercados bursátiles.

Especialmente importante son los niveles de sobrecompra, que dan indicios muy claros que en las próximas sesiones las ventas se impongan sobre las compras. Es otro de los escenarios que te deben implicar para finiquitar las operaciones, aunque sea de forma temporal. Incluso con la posibilidad que más tarde puedas recomprar las acciones, pero con precios más baratos.

Cuarta clave: ante cualquier signo de debilidad

Puede que todo te vaya perfectamente en la cartera de inversión que hayas confeccionado hace unos años. Pero ante cualquier debilidad, bien de los mercados bursátiles, o de la propia compañía de la que eres accionista, servirá para que deshagas a la mayor prontitud de sus acciones. No en vano, podrá ser la antesala de movimientos correctivos de mayor intensidad.

Una de las estrategias más útiles para comprobarlo este estado residirá en que los mínimos en su cotización serán decrecientes. Toda una señal que implicará que el cambio de tendencia se ha instalado definitivamente en el valor que tienes tomado posiciones. La mejor solución partirá de la orden que des al banco para que venda tu participación.

Quinta clave: actuando sin avaricia

No trates de forzar las ganancias en la renta variable, y en este sentido puede ayudarte ese antiguo refrán que se aplica disciplinadamente en los mercados bursátiles y que dice que “el último euro se lo lleve otro”. Un buen consejo, que sin duda, te ayudará en más de una ocasión, y del que los inversores más experimentados pueden dar fe sobre su aplicación y los beneficios que les generan.

Es preferible, por otra parte, no apurar en el recorrido alcista de una acción, antes que quedar atrapado en el mercado. Y es que esta situación te pueda llevar a realizar pésimas ventas, muchas de ellas con importantes pérdidas que te lastrarán el patrimonio personal. Para evitar estos casos, tan habituales entre los inversores minoristas, la estrategia más favorable para defender tus intereses será aplicar una orden de venta que limite las pérdidas. Será posible a través de las conocidas stop loss, que te ayudarán a lograr los objetivos.

Sexta clave: asumir los errores cometidos

Puede que al final todo sea tan simple como te has equivocado en la elección de los valores que conforman tu cartera de inversión. O sencillamente sus cotizaciones no se muevan como habías previsto inicialmente. En este caso, tendrás que reconocer el error y vender las acciones directamente, perdiendo dinero en la operación. No habrá más remedio si no deseas que tu situación se ponga más desfavorable para tus intereses.

Además, te servirá para redirigir tu estrategia inversora hacia otras compañías cotizadas, que seguramente tengan mejores perspectivas de crecimiento en sus precios. Y con los que amortizar el fracaso de tu anterior contacto con los mercados. Incluso, podrás optar por valores con muy alto rendimiento por dividendo, de hasta el 8%. Compensarán las pérdidas acumuladas por la anterior actuación.

Séptima clave: ajustarte al precio real de las acciones

Uno de los parámetros más objetivos para vender tus posiciones en la renta variable consistirá en que cuando las acciones se acerquen a su precio objetivo, será el momento en que tendrás que deshacerte de ellas. En este sentido, los datos facilitados por los brokers te ayudarán a desarrollar el proceso vendedor. Raramente se exceden en su cotización en más de un 10%. No vale la pena arriesgar al llegar a estos niveles.

Otra cosa bien diferente es que tus inversiones coticen muy alejadas de estos precios, con lo que los márgenes para seguir en tus posiciones serán más flexibles. Y con bastante recorrido para obtener las metas deseadas desde el principio.

Octava clave: huir de las noticias desfavorables

Las bolsas son muy sensibles a las noticias desfavorables en economía

Ante cualquier noticia, o hecho reseñable que perjudique la cotización de tus acciones, la estrategia más rápida para proteger los ahorros no será otra que vender las acciones. En estas situaciones, por otra parte habituales en los mercados financieros, no es raro que los principales intermediarios realicen revisiones a la baja de su precio objetivo.

También las noticias negativas sobre la evolución de la economía a nivel global se trasladan a las cotizaciones de las compañías, que se deprecian en pocas sesiones bursátiles. Claro está que puedes remediarlo, si ante la aparición de los primeros signos de debilidad en los mercados, te decides finalmente a cerrar todas las posiciones que tengas abiertas en esos momentos.

Novena clave: con síntomas de agotamiento

Muchas veces la intuición del propio inversor es decisiva para comprobar cómo van a evolucionar los precios de las acciones durante las próximas semanas. Hasta lleguen a la conclusión que el valor en cuestión tiene poco recorrido, o cuando menos, que su potencial de revalorización se ha agotado. No será el momento de arriesgar en tus posiciones compradoras.

Las señales que muestran esta situación, por otra parte, pueden visualizarse perfectamente a través de un gráfico. Mostrando, si llegase el caso, a mostrar como las posiciones generales de los vendedores se imponen claramente sobre los compradores. No te merecerá la pena seguir en el mercado, aun cuando tus posiciones no sean realmente ganadoras. Desde esta perspectiva, el análisis técnico será la mejor herramienta que dispongas para detectar estas señales de debilitamiento.

 


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  1.   Jose recio dijo
  2.   Lola dijo

    Me daís algunas valores para comprar?

    1.    Jose recio dijo

      Todo dependerá de tu perfil, pero en principio algún valor con buen dividendo para protegerte. Muchas gracias, y tendrás algunas pista en los próximos artículos