Imagina que te has quedado en paro. Afortunadamente tienes una prestación por desempleo, un paro, que te permite no agobiarte demasiado a fin de mes porque entra dinero en casa. Sin embargo, tienes un proyecto que te encantaría poner en marcha, y lo único que te falta es dinero. Entonces, ¿por qué no capitalizar el paro?
Este concepto tan extraño cada vez es más utilizados por muchos desempleados que deciden invertir el dinero del pago en crear una empresa o negocio con el cual ganar más pero, ¿a qué se refiere el capitalizar el paro? ¿Cómo se puede hacer? ¿Qué ventajas e inconvenientes tiene? Todo esto y mucho más es de lo que te hablamos a continuación.
Qué es capitalizar el paro
Capitalizar el paro también se conoce como pago único o capitalización del desempleo. Es una práctica según la cual las personas que cobran la prestación por desempleo, y quieren iniciar una actividad por cuenta propia, pueden solicitar que se les pague, de una única vez, todo o parte de la prestación por desempleo que les queda por cobrar.
En otras palabras, el SEPE adelanta el dinero de la prestación por desempleo que falte por recibir en un único pago, de tal forma que se obtiene un capital que hay que utilizar para iniciar el negocio que se pone en marcha.
De esta definición, has de sacar en claro varios puntos:
- Que tienes que darte de alta como autónomo. De hecho, capitalizar el paro implica que vas a iniciar tu propio negocio, y para ello debes estar dado de alta en el RETA (Régimen Especial de Trabajadores Autónomos). Otra opción es que seas socio de una sociedad limitada o socio trabajador, ya sea de una cooperativa o de una sociedad laboral.
- Que ese pago único se debe utilizar para invertir en el negocio (convirtiéndose de alguna manera en el capital de esa empresa).
Quién puede pedir capitalizar el paro
Obviamente, las personas que pueden pedir capitalizar el paro son aquellas que están recibiendo una prestación por desempleo (es decir, están cobrando el paro). Ahora bien, no hay que confundir esta prestación por desempleo del subsidio de desempleo. En este caso solo podrás capitalizarlo si obtienes la prestación contributiva.
Además, se deben cumplir otra serie de requisitos por parte de quien la solicita como son:
- Que la duración de la prestación sea de al menos tres meses desde su solicitud.
- No estar dado de alta en la Seguridad Social.
- No haberte beneficiado de un pago único anteriormente (ponen un límite de cuatro años, es decir, que cada cuatro años sí que podrías obtenerlo).
- Acreditar que estás de alta como autónomo o como socio trabajador.
- No haber impugnado el despido. Si lo has hecho, no vas a poder capitalizar el paro hasta que se resuelva la impugnación.
Ventajas de capitalizar el paro
Ahora que ya sabes lo que es capitalizar el pago, tomar la decisión de hacerlo o no dependerá de muchos factores, así como de la situación en la que te encuentres.
Así, entre las ventajas que tiene capitalizar están:
- El poder cobrar todo de una sola vez. De esta forma, no tienes que esperar para obtener el dinero y poder llevar a cabo los proyectos que tienes, sino que te adelantan el dinero del paro para que puedas ponerte cuanto antes. Eso sí, recuerda que una vez solicitado, no es inmediato, sino que pasa un mes.
- Puedes elegir cómo recibirlo. Es decir, recibirlo todo de una vez o bien mensualmente (reduciendo con ello los gastos por la subvención de la cotización).
Inconvenientes
Todo lo bueno tiene algunos aspectos «menos buenos», y en este caso hablamos de:
- Consumir derecho a prestación. Para capitalizar el paro es necesario un proyecto y hacerte autónomo; eso quiere decir que vas a consumir lo que te den de prestación en un negocio que puede triunfar, o que puede acabar con el dinero que te han adelantado (y quedarte sin nada).
- Hay discriminación. Lo sentimos, pero es así. Los hombres menores de 30 años, y las mujeres hasta 35 años, pueden capitalizar el 100% del paro, pero más allá de esa edad solo podrían capitalizar el paro en un 60%, siendo el 40 restante para aplicación de la cotización por desempleo.
- Se pierden subvenciones de las cuotas. Esto es debido a que, si en la solicitud te equivocas, el error lo pagas perdiendo el 40% de la subvención que te corresponda.
Tipos de capitalización
Otro aspecto que debes tener en cuenta es a la hora de capitalizar el paro, ya que se puede hacer de dos maneras diferentes:
- Capitalizar el 100%, es decir, recibir todo el dinero que falta de la prestación por desempleo de una vez para financiar la inversión que necesita el negocio.
- Capitalizar por pagos mensuales. Este dinero se destina entonces a compensar las cuotas de los autónomos, de tal forma que parte de tu paro sirve para pagar la cuota mensual del autónomo y otros posibles gastos.
Cómo capitalizar el paro
Si después de leer todo, y de informarte, has decidido capitalizar el paro, has de saber cuáles son los pasos que debes dar para hacerlo. En este caso, lo primero que debes haces es acudir al Servicio Público de Empleo Estatal, es decir, al SEPE. Ve a la oficina que te corresponda (siempre con cita previa para que te atiendan sin hacerte esperar demasiado).
Ellos te informarán sobre el pago único y, si ven que estás decidido, tendrás que rellenar una solicitud adjuntando además una memoria de la actividad que vas a desarrollar, así como las inversiones que vas a afrontar. Eso sí, recuerda que los importes que pongas deben estar sin IVA, porque el IVA no se puede subvencionar.
Lo más complicado para ti puede ser elaborar la memoria del proyecto, pero a través de Internet puedes encontrar muchas plantillas de Word que te ayudarán a hacerla fácilmente. O, en caso de que no sepas, o no quieras equivocarte, siempre puedes solicitar ayuda a algún gestor o asesor para que la elabore acorde con lo que te solicitan.
Una vez entregues todo, además de una prueba de que te das de alta como autónomo, al mes siguiente te harán efectivo, si todo está bien, el pago único del paro.