Valores que cotizan por debajo de un euro

valores por debajo de un euro

Dentro del mercado continuo nacional puedes encontrarte con una amplia representación de valores que cotizan por debajo de la unidad de euro. A simple vista, esta particularidad puede hacerte más sensible para empezar a operar con estas empresas a partir de ahora. No obstante, su bajo valor en los mercados de renta variable no las hacen más favorables para que puedas rentabilizar tus ahorros. Incluso sus operaciones pueden ser mucho más peligrosas, con más riesgos añadidos que deberás tener en cuenta antes de tomar posiciones en estas compañías.

Se caracterizan principalmente porque cualquier desviación en su cotización puede representar un porcentaje muy elevado de ganancias (o pérdidas). Desde este escenario, son valores muy propensos para realizar operaciones especulativas en la bolsa. Incluso en la misma sesión bursátil, a través de los movimientos intradia. Pero que coticen en niveles de precios tan bajos también puede deberse a otra serie de causas, que serán convenientes que la conozcas si vas a tomar posiciones en estos valores durante los próximos días.

En la bolsa española hay cerca de 20 valores que presentan estas características, y regularmente cotizan por debajo de 1 euro. Principalmente proceden de empresas de baja capitalización, y con muy poca liquidez. Como consecuencia de ello, te será mucho más difícil entrar y salir de los mercados. No en vano, son muy pocos los títulos que se negocian todos los días en los parqués de renta variable. Algunas de las empresas que se mueven bajo estas constantes son Amper, Ercros, Natra, Deoleo, Tubos Reunidos o Sniace, entre otras.

¿De qué empresas estamos hablando?

empresas que cotizan por debajo del euro

Hay otro grupo de los valores cotizados por debajo de la unidad de euro que se encuentran con problemas económicos en sus cuentas de resultados, y hasta un nivel de endeudamiento muy elevado. Y que como consecuencia de ello, se han depreciado en sus precios hasta estos niveles tan bajos. Se puede decir, sin temor a equivocarse, que el valor real que les asignan los mercados bursátiles es lo que representan estas empresas. Y con títulos tan representativos de la renta variable nacional como Codere, Puleva Biotech o Inmobiliaria Colonial.

Y como excepción a estos casos, hasta están integradas otras compañías procedentes de potentes grupos bancarios, como por ejemplo Bankia o Liberbank, que habitualmente se mueven bajo estos márgenes tan estrechos, como consecuencia del valor real de sus acciones. Pero no porque coticen bajo niveles tan bajos deben ser objeto de tu interés inversor. Serán otros los parámetros diferentes los que deberás aplicar para tomar posiciones en valores de estas especiales características.

Y en cualquier caso, no suponen que sean auténticas gangas en los mercados, ni mucho menos. Incluso puede ser más que habitual a que su precio de cotización sea excesivamente caro para comprar sus acciones, aunque estén en un rango en niveles de 0,30 o 0,40 euros. Por otra parte, buena parte de las empresas que han quebrado durante los últimos ejercicios (La Seda de Barcelona, Sniace…) se movían bajo estos precios. De ahí que debas ser muy precavido para valorar la inversión en alguna de estas compañías cotizadas. Implican un riesgo adicional, que no todos los pequeños y medianos inversores pueden asumir.

¿Qué operaciones puedes realizar?

como se debe operar con estos valores

De todas formas, esta clase de acciones hace las delicias de los inversores más especulativos. Puedes comprobarlo todos los días en los foros bursátiles, en donde el interés por estos valores tan especiales es muy alto por parte de los usuarios. No en vano, piensan que su potencial de revalorización puede ser más generoso, cuando en realidad no es así realmente. De todas formas, si te ves tentado en tomar posiciones en algunos de estos valores deberás regirte por una serie de pautas en tus operaciones.

Están destinadas para operaciones desarrolladas al más corto plazo, nunca al medio o largo. Y desde el mismo momento en que hayas cubierto los objetivos, no te quedará más remedio que cerrar las posiciones rápidamente, y disfrutar de las plusvalías generadas desde tu entrada en la bolsa. Tampoco será muy recomendable que realizar inversiones bajo cuantías económicas muy elevadas. Sino todo lo contrario, solamente tendrás que destinar el 15% como tope máximo de tu patrimonio. Y a ser posible ayudado con una orden de limitación de pérdidas, las conocidas como stop loss, que te beneficiarán en la protección de la inversión.

Generalmente presentan una importante volatilidad en sus cotizaciones. Con una diferencia muy notable entre su precio máximo y mínimo en una misma sesión bursátil. Propiciando que puedas ganar mucho dinero, o por el contrario, las pérdidas se instalen definitivamente en tu cartera de inversión. Algunas veces de forma irreversible, ya que tardarán muchos años en recuperar sus precios originales, y hasta puede que nunca. Y que en muchos casos, implicarán que hagas unas pésimas ventas, perdiendo muchos euros por el camino.

Inversores más receptivos a estos valores

Los minoristas que deseen construir una bolsa de ahorro a través de la renta variable deberán olvidarse de estas empresas para siempre. No podrán cumplir sus objetivos, y serán más los inconvenientes que les generen que las ventajas. Desde este escenario, otra clase de inversores – con un perfil intermedio – tampoco deben abrirse a estas operaciones. En la actual oferta de la renta variable cuenta con propuestas más sugestivas y rentables que serán objeto de su seguimiento. No solamente en los mercados nacionales, sino de fuera de nuestras fronteras.

Son los inversores más agresivos, jóvenes y que hacen sus operaciones con una inusitada rapidez quienes tienen mayores ventajas para formalizar las compras de estas acciones con precios tan bajos. Suelen operar online, desde el ordenador o su Android, y su período de permanencia no es muy elevado, en pocos días o semanas. Para llevar con mayor éxito las operaciones en los mercados será básico que ajustes los precios de compra (y posteriormente el de venta) para rentabilizar las operaciones. Solamente de esta manera podrás conseguir los objetivos, al moverse bajo márgenes tan estrechos.

Otro aspecto a tener en cuenta para esta clase de inversión es que habitualmente muy pocos de estos valores se mueven bajo una tendencia alcista en la cotización de sus precios. Lo más frecuente es que estén inmersos en procesos bajistas, o cuando menos de profunda lateralidad, que no harán interesantes su evolución en los mercados. Con graves riesgos de seguir profundizando en sus pérdidas, hasta llegar a niveles insospechados. Planteándote si merece realmente la pena optar por esta estrategia inversora.

Además, pocas son las empresas de análisis financiero que hacen un seguimiento regular de estas acciones. Hasta el punto que muchas de ellas ni tan siquiera tienen asignado un precio objetivo. Como consecuencia de esta circunstancia será mucho más complicado desarrollar una estrategia certera para rentabilizar los ahorros. No en vano, hay más que perder que ganar en estas operaciones. Y en donde la experiencia jugará un rol muy importante para formalizarlas.

Consejos para operar con estos valores

consejos para operar en estos valores

Debes plantearte que estás ante un grupo de valores muy especiales, que requerirán de un tratamiento diferente para considera si merece la pena entrar ahora en sus posiciones. Cuando te encuentres en el repaso diario de la bolsa con valores que cotizan por debajo de un euro, te verás obligado a adoptar una serie de precauciones que no son normales en otras compañías que no cumplen con estos requisitos.

Para ayudarte a definir esta estrategia de inversión, no te quedará más remedio que aplicar una serie de pautas de comportamiento en tus actuaciones en los mercados de renta variable. No te serán difíciles de aplicar, y a cambio, los beneficios que puedes conseguir podrán compensarte en las operaciones realizadas. Por medio de las siguientes recomendaciones que te exponemos a continuación.

  • No porque coticen por debajo de la unidad de euro significa que estén baratas, sino que por el contrario, el precio que pagues por sus acciones puede ser realmente caro, y en casos hasta desproporcionado.
  • Deberás ser muy cauto en el momento de seleccionar estos valores, ya que buena parte de ellos se encuentran con graves problemas de financiación, y hasta con la posibilidad real que puedan cesar en su actividad empresarial.
  • No es extraño que alguna de estas acciones provenga de precios mucho más elevados, y que durante los últimos años su cotización se haya depreciado en más de un 70%. No será, por tanto, un buen punto de partida para iniciar tus operaciones en la bolsa.
  • Las oportunidades de negocio en estos niveles de precios escasean, y no es la mejor forma para conformar una cartera de inversión con plenas garantías, en donde los riesgos serán muy elevados, por encima de los restantes valores de las renta variable española.
  • No destines aquella parte de los ahorros que vas a necesitar en los próximos meses para afrontar los principales gastos personales y familiares (pagos fiscales, el colegio de los niños, las próximas vacaciones, recibos domésticos, o hasta algún desembolso no previsto).
  • Teniendo una oferta bursátil tan extensa como la actual, para que preocuparte de estas acciones que te crearán mayores problemas. Opta por otros canales de la inversión más seguros y que te ofrezcan más garantías en las operaciones.
  • Si te limitas a estas operaciones, el balance final de tus cuentas personales podrá verse comprometidas a final de cada ejercicio. Esta clase de inversión nunca debe ser un objetivo, sino un complemento a otras actuaciones en los mercados bursátiles.
  • Si a pesar de todo, crees que merece la pena arriesgar tu dinero, hazlo bajo las máximas garantías, limitando las pérdidas, bajo débiles aportaciones monetarias, y muy especialmente vigilando los niveles en donde cotizan sus precios.

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