Este mes va a pasar a la historia por haber arrastrado a las acciones a su momento más bajo de los últimos años. En donde su precio se ha situado en niveles de 7 euros por acción después de haberse despreciado desde niveles de 9 euros. Con una depreciación cercana el 20 % en este periodo, algo que no había en los últimos años. Es especial, al estar considerada Telefónica uno de los valores más estables del índice selectivo español, el Ibex 35. ¿Pero qué ha pasado realmente a la operadora de telecomunicaciones de referencia para los inversores?
El hecho de que las ventas se hayan impuesto con una claridad sobre las compras se debe a que su aspecto técnico se ha deteriorado notablemente. Después de haber roto el importantes soporte que tenía en 9,10 euros. Hasta el punto de que la corriente vendedora se ha aprovechado de esta circunstancia. Para alcanzar los niveles de precios actuales y que podrían constituirse en un nivel de entrada para rentabilizar los ahorros a partir de estos momentos.
No obstante, hay una causa de fuerza mayor para explicar lo que está sucediendo con Telefónica en estos precisos momentos. Se debe a la actuación de ciertos de fondos de inversión que han presionado los precios a la baja con el objetivo de entrar en sus posiciones a precios mucho más competitivos que hasta esos momentos. En este sentido, la actuación de estos intermediarios financieros puede dar alguna que otra pista sobre cuál debe ser tu estrategia de inversión en los próximos días.
Telefónica: ¿ha tocado suelo?
En opinión de buena parte de los analistas financieros puede que el precio de las acciones haya tocado suelo. No obstante, la clave estará en que se respete su nuevo soporte que está situado muy cerca de los 7 euros la acción. De soportarlo, no puede descartarse que vuelva de nuevo a su nivel de precio en los meses anteriores, o incluso intentar acercarse hasta los 10 euros. En cualquier, a estos precios actuales todo parece indicar que este valor es una oportunidad de negocio. Al menos al medio y largo plazo que es un periodo de permanencia muy indicado para realizar las inversiones en este valor tan importante de la renta variable nacional.
Por otra parte, tampoco puede olvidarse que la operadora de telecomunicaciones es uno de los valores más generosos en el reparto de dividendos a los accionistas. Con una rentabilidad fija y le defensivos. No en vano, disponen de una renta fija dentro de la variable y con un rendimiento superior al de los principales productos destinados para el ahorro. Como por ejemplo, imposiciones a plazo fijo, cuentas de alta remuneración o incluso los bonos nacionales. En donde en todos los casos raramente se supera la rentabilidad del 1 %, incluso desde algunos modelos rentables hasta hace unos pocos años.
Manipulación de los fondos
De todas, formas, el mes de septiembre ha puesto de manifiesto el gran papel que han jugado los fondos de inversión para llevar a sus acciones a sus niveles actuales en los precios. Es mucho lo que se están jugando estos fondos y en estos momentos les interesa que los precios de Telefónica estén tan bajos y en unos niveles no vistos en los últimos ejercicios. Desde esta perspectiva, es más lo que puedes ganar que perder. No en vano, los analistas piensan que ya le queda poco recorrido a la baja. Hasta el punto de que puede ser una operación objeto de compra.
En otro orden de cosas, si vas a dirigir las operaciones al largo plazo no tendrás muchos problemas para que en algún momento sus acciones puedan alcanzar los 9 o 10 euros o incluso niveles más altos en su cotización. Es decir, con un potencial de revalorización muy cercano al 30 %. A pesar de que en el más corto plazo no cabe duda de que la volatilidad se ha instalado en la formación de sus precios. En donde puede seguir dando más de un disgusto, en especial si los mercados financieros cambian de tendencia y se impone la corriente vendedora entre los inversores. Con una intensidad muy poco conocida hasta estos momentos.
Resultados no tan positivos
Otro de los aspectos que pueden explicar este tremendo bajón en las acciones de Telefónica es que sus resultados empresariales han defraudado a buena parte de los inversores. Sus líneas de negocio no están respondiendo a las expectativas creadas desde un principio. Y esto explica que las acciones se hayan depreciado ante el temor de que los beneficios de la empresa puedan resentirse en los próximos trimestres. Es decir, no son unos resultados empresariales que hayan gustado a los pequeños y medianos inversores.
Los problemas en las economías emergentes es otro de los factores para explicar esta importante caída en los precios de la operadora nacional. Porque en efecto, los problemas de los países americanos pueden perjudicar muy seriamente a Telefónica en sus objetivos de cara al corto y medio plazos. En este sentido, sus últimos resultados empresariales ponen de manifiesto una ligera paralización en sus cuentas como consecuencias de algunas de las causas expuestas anteriormente.
Gana un 8,6 % más que en 2017
De todas formas, hay que recalcar que la operadora nacional ha obtenido un beneficio neto de 1.739 millones de euros en el primer semestre del año, los que representa un 8,6 % más que en el mismo periodo del año pasado. Todo ello a pesar de la caída de los ingresos por el impacto de las divisas, y que han jugado en contra de los intereses de Telefónica.
Por el contrario, la deuda neta – uno de sus mayores peligros – se ha situado en este periodo en 43.593 millones. Esto representa que es cerca del 10 % menos que hace justamente un año. Aunque el dato más relevante es que reduce su deuda por quinto trimestre consecutivo, aunque no ha tenido mucha repercusión en la cotización de sus acciones. En donde España se mantiene como el primer mercado de la compañía telefónica y es un factor a tener en cuenta por los inversores de cara para que puedan rentabilizar sus ahorros de cara a los próximos años.