Tanto la renta variable en Europa como en Estados Unidos está a punto de alcanzar sus cotas máximas en la cotización de sus valores. Con algunas señales de debilidad sobre que pueda desarrollarse un cambio de tendencia en los próximos meses. Además, no puede olvidarse que las bolsas a partir de segundo trimestre del año son tradicionalmente bajistas. En donde también juega en contra el hecho de que los mercados americanos lleven un racha histórica en sus subidas y este escenario deberá parar en algún que otro momento. Y este puede estar muy próximo en el calendario.
Por otra parte, hay que indicar que la bolsa española negoció en enero 41.407 millones de euros, un 6,8 % más que en el mes anterior y el mejor mes desde octubre, aunque un 18,6 % menos que en enero de 2018. El número de negociaciones se situó en 3,6 millones, lo que representa un 15 % más que en diciembre, según los últimos datos apuntados desde Bolsas y Mercados de España (BME). Es decir, se está notando un repunte en las operaciones por parte de los pequeños y medianos inversores como consecuencia del rally alcista que se ha producido en el mes de enero. Con alzas generalizadas en todos los mercados de renta variable.
Ante un posible agotamiento de las bolsas internacionales es buen momento para buscar otras alternativas a la inversión. En este sentido, una buena solución está representada por los mercados de renta variable de algunos países emergentes. Con un potencial de revalorización superior al de los mercados tradicionales. Aunque por otra parte, son operaciones que conllevan más riesgos que las restantes por las especiales características de estas plazas bursátiles. A continuación apuntamos algunas ideas para dirigir los ahorros en los próximos meses.
Emergentes: Brasil el primero
La potencia iberoamericana es la principal apuesta por buena parte de los analistas financieros internacionales. No es vano, su comportamiento está siendo muy positivo desde que Jair Bolsonaro asumiera la presidencia del país. Con alzas generalizadas en los valores de esta bolsa tan importante en el continente americano. En donde el Bovespa ha subido en este periodo más del 10 % y muestra un aspecto técnico impecable desde todos los puntos de vista. En cierta forma, provocado por la oleada de privatizaciones en este país y que tanto gustan a los mercados financieros.
Desde este escenario general, la bolsa brasileña puede ser una de las opciones más claras que tienen los pequeños y medianos inversores para rentabilizar sus ahorros a partir de estos momentos. Más allá de otras consideraciones técnicas y también desde el punto de vista de los fundamentales de los valores que cotizan en este mercado financiero. Por otra parte, hay que contar que es una plaza bursátil con muchos riesgos y esto debe servir para que seas algo más precavido en las operaciones realizadas.
Optimismo en el sudeste asiático
Uno de los mercados financieros que pueden ser más beneficiados de un posible acuerdo comercial entre Estados Unidos y China es sin duda el que representan los dragones asiáticos. En todo su conjunto ya que están floreciendo subidas de una gran intensidad y lo que es más importarte, con un notable volumen de contratación. Esto hace pensar que puedan desarrollar nuevas alzas a partir de estos momentos, aun sabiendo que se producirán oportunas correcciones en sus precios.
Estos mercados internacionales pueden constituirse en la gran sorpresa que nos depare este año que hemos comenzado. En donde es uno de los más positivos en el orden internacional y con un importante potencial de revalorización de cara a los próximos meses. Puede ser una alternativa agresiva para los pequeños y medianos inversores, siempre y cuando puedan controlar sus operaciones para evitar situaciones no esperadas en sus cuentas de valores. No solamente hablamos de la bolsa china o japonesa, sino de la todos los países de esta importante área geográfica del mundo.
Con riesgos, la bolsa de Turquía
Es sin lugar a dudas la apuesta con mayor riesgo de todas y debido a las especiales características de este mercado de la renta variable internacional. En donde puede subir mucho su índice bursátil, pero también depreciase con especial relevancia como consecuencia de la evolución de la economía turca. En donde también juega un papel muy importante la cotización en los mercados financieros de su divisa, en especial en su cambio con la moneda norteamericana. Desde luego que los riesgos están latentes, pero la recompensa puede ser de las más notables en los mercados internacionales.
Por otra parte, es un mercado de renta variable que se distingue por ser muy volátil. Con unas diferencias muy importantes entre sus precios máximos y mínimos y que hace de este mercado financiero muy apetecible para las operaciones de trading. Por tanto, la bolsa turca es una de las alternativas para los inversores más propensos al riesgo y que sepan controlar sus emociones en los momentos de mayor inestabilidad de las mismas. Porque es cierto que pueden dejarse muchos euros por el camino y no todos pueden asumir este escenario tan especial.
Otras alternativas a la inversión
Fuera de estos mercados de renta variable que hemos apuntados poco más hay en estos momentos. Si acaso una ligera exposición a la bolsa de Rusia, en función de la evolución en el precio del crudo. Pero siempre de una forma minoritaria, es decir bajo operaciones de pequeña cuantía monetaria. Aunque pueden abrirse posiciones a través de fondos de inversión en renta variable en el que estén presentes acciones que cotizan en este mercado financiero. Controlado en todo lugar los movimientos para deshacer las posiciones.
Por último, también puede tantearse lo que pueda pasar en algunos emergentes como el representado por la renta variable de India. Aunque puede que lleguemos un poco tarde ya que parece que lo mejor ya ha pasado. De todas formas, es un mercado muy potente y que habrá que analizar para constatar si entramo o no en esta plaza bursátil. En donde los riesgos son también muy elevados y conviene ser precavidos en la toma de posiciones a partir de estos momentos.