Cuando estás acabando la carrera lo normal es que te informes acerca de las posibilidades que tienes de trabajar. Quizá hasta hagas prácticas de empresa. Pero, durante los tres años siguientes puedes optar a un contrato en prácticas.
Ahora bien, ¿qué es? ¿Qué condiciones te ofrece? ¿Es rentable aceptarlo? De todo esto, y de algunas cosas más, es de lo que vamos a hablarte a continuación.
Qué es un contrato en prácticas
Lo primero de todo es que debes entender qué es un contrato en prácticas. Se trata de un documento laboral firmado por una empresa y un trabajador, este último que está acabando o acaba de titularse y que, por tanto, no tiene ninguna experiencia laboral. Dicho de otro modo, es un contrato con el cual se busca aplicar la formación que ha recibido en su carrera al mundo laboral, teniendo para ello ayuda por parte del empresario para adaptarse y saber cómo debe hacer su trabajo.
Muchos lo ven como una oportunidad y puente para saber aplicar esos conocimientos formativos, ya que muchas veces una cosa es la teoría y otras la práctica. Y aunque en la formación se explica bien lo que hay que hacer, a veces en la práctica es necesario dar otros pasos o tener en cuenta otros factores que influirán a la hora de hacerlo bien.
Características del contrato en prácticas
Este tipo de contratos se realiza siempre por escrito, donde además de poner cuál es la titulación que tiene, se pone la duración del contrato, el tipo de puesto de trabajo, horas de trabajo y cómo va a ser la jornada laboral.
Otro punto muy en cuenta para aquellos que firman un contrato en prácticas es la remuneración que se va a recibir. Si bien va a ser en función del nivel de estudios y del convenio colectivo, lo cierto es que la reforma laboral de 2022 cambió un poco esto.
Ahora, el salario debe venir determinado en el convenio colectivo o bien en el del grupo profesional. Por si no lo sabes, antes se ofrecía un 60% del salario fijado a un trabajador en el mismo trabajo pero sin contrato en prácticas (el 75% en el caso del segundo año). Sin embargo, en la actualidad esto viene ya fijado.
Cuánto dura un contrato en prácticas
El contrato en prácticas tiene una duración mínima de 6 meses y máxima de 12 meses, y durante este tiempo, tal y como te hemos explicado antes, se recibe una remuneración. Antes esta podía ser inferior al salario mínimo interprofesional (porque se hablaba del 60 o del 75%). Pero hoy en día sí que se asegura que una persona en prácticas tenga como mínimo ese salario mínimo interprofesional.
Sin embargo, durante este periodo cuentas con las mismas prestaciones y derechos que el resto de empleados de la empresa.
Requisitos para firmar un contrato en prácticas
Tras conocer un poco más el contrato en prácticas, ¿te gustaría saber si estás cualificado para que te ofrezcan uno? Ten en cuenta que la reforma laboral que se llevó a cabo en 2022 ha cambiado algunas condiciones, pero la mayoría de ellas son las siguientes:
- Tener una titulación universitaria o bien formación profesional de grado medio o superior, un certificado de profesionalidad o equivalente en los últimos tres años (cinco si son discapacitados).
- No haber tenido un contrato de formación en la empresa superior a tres meses (eso te invalida para firmar uno en prácticas, salvo que estuvieras como becario).
- No haber tenido un contrato en prácticas anterior de un año de duración. Antes el contrato en prácticas se podía celebrar por un máximo de dos años, pero con la nueva reforma esto se acortó y si ya tienes un año de este tipo de contrato no puedes celebrar otro. Aun teniéndolo de menos, solo podrían hacerte uno con la duración máxima total de un año.
Cuándo se extingue el contrato en prácticas
La extinción del contrato en prácticas puede darse por dos situaciones:
- No se supere el periodo de prueba, es decir, un mes desde que se firmara el contrato (salvo que por convenio colectivo se diga otra cosa).
- Haya un despido disciplinario.
- Haya un despido por causas objetivas.
- Se cumpla el periodo máximo de un contrato en prácticas, que ahora mismo es de un año.
Hay que tener en cuenta que, salvo en el despido por causas objetivas, no se tiene derecho a indemnización por perder el trabajo. Solo en ese caso se pagarían 20 días de salario por año trabajado.
Una vez finalizado el contrato, la empresa ha de entregar al trabajador un certificado de prácticas en el que constará la duración de estas, el puesto de trabajo y las tareas que ha llevado a cabo y, en ocasiones, un comentario acerca de las capacidades que ha adquirido el trabajador (una especie de recomendación).
Beneficios del contrato de prácticas
Ahora que te queda un poco más claro cómo es el contrato en prácticas, ¿quieres saber qué ventajas tiene? Lo cierto es que hay tanto para el empresario como para el trabajador.
A grosso modo, las principales que tiene son las siguientes:
- La empresa puede beneficiarse de una reducción del 50% en las cuotas a la Seguridad Social (por contingencias comunes) en el caso de contratar personas con discapacidad igual o superior al 30%. En el caso de que sean desempleados contratados en C.E.E. entonces tendrá el 100% de la aportación empresarial subvencionada.
- Puede haber bonificaciones al convertir un contrato en prácticas en uno indeterminado. Esto solo estará disponible para empresas con menos de 50 trabajadores. Si es así, al transformar el contrato en prácticas a uno indefinido, si es un hombre se consigue una bonificación de 500 euros al año, y de 700 en el caso de las mujeres.
- Obtener una conexión por parte del trabajador de la formación que ha recibido y la práctica en el mercado laboral para aplicarla. Si bien al principio tiene los conocimientos necesarios para adaptarse al puesto de trabajo, no hay que olvidarse que es un «aprendiz» y que, como tal, debe tener una persona que le explique y ayude a saber realizar el trabajo.
Como ves, el contrato en prácticas puede ser un primer acercamiento al mercado laboral que se produce cuando se está acabando una carrera o bien se ha terminado recientemente. De esta forma, es un paso intermedio para poder aplicar los conocimientos que se adquieren formativamente a la práctica sabiendo que hay alguien que te va a ayudar a saber lo que tienes que hacer. ¿Has tenido un contrato en prácticas alguna vez?