La Reserva Federal de los Estados Unidos (Fed) ha subido los tipos de interés un cuarto de punto hasta un rango de entre 2,25 % y 2,5 %, con lo que se sitúa a niveles no vistos en más de una década en la primera potencia económica del mundo. Se trata de la última de las cuatro subidas que el organismo había planificado realizar en 2018, si bien ha sugerido que el ritmo en 2019 será más moderado. Con la previsión de que sean dos y no cuatro las alzas que se pueden desarrollar durante este periodo.
Esta noticia ha impactado muy negativamente en los mercados de renta variable, con descensos generalizados en todos los índices bursátiles del mundo. Con una intensidad no vistas en los últimos meses, con caídas entre el 2 % y el 3 % y en donde el índice de referencia de la bolsa española, el Ibex 35, le ha llevado a tantear el nivel de los 8.600 puntos. Uno de los soportes más importantes que tiene en estos momentos y que puede inducir, si al final es derribado, a que la tendencia bajista se instale definitivamente en la plaza española.
Esta reacción de los mercados financieros prueba de la importancia que tienen los tipos de interés en las bolsas de todo el mundo. Con reacciones muy intensas, en uno u otro sentido, que dependerán de la evolución de este importante parámetro económico. Hasta el punto de que se planteen los pequeños y medianos inversores como afecta en realidad la evolución de los tipos de interés a la actividad económica y muy fundamentalmente a las relaciones con el siempre complicado mundo del dinero y de la inversión.
Tipos de interés elevados
Si aplicamos la decisión por parte de la Reserva Federal de los Estados Unidos de elevar, aunque sea gradualmente, los tipos de interés conviene saber en dónde pueden estar afectados los usuarios en general. Pues bien, un alza en este parámetro económico implica por encima de todo un control más eficaz de los precios de los productos y bienes que se adquieren. Es decir, habitualmente la inflación tiende a bajare en estos escenarios y por tanto hay un mayor control sobre los precios. El efecto más inmediato es que el encarecimiento de la vida no se producirá con la misma intensidad.
Por otra parte, este aspecto propicia que el consumo entre los usuarios sea mayor y beneficie al crecimiento económico de un país por encima de otras consideraciones técnicas. Por tanto, este sería uno de los factores más positivos de la actuación en la subida de los tipos de interés. Porque es al fin y al cabo uno de los objetivos que tienen los gobiernos internacionales al desarrollar su política económica. Tal y como se ha demostrado en los últimos años y muy especialmente tras el desarrollo de la última crisis económica, entre los años 2007 y 2009.
Préstamos más caros
Por el contrario, uno de los efectos más temidos ante la subida de los tipos de interés es que las líneas de financiación se encarecen, tanto entre los particulares como en las empresas. No en vano, habrá que dedicar un mayor esfuerzo económico en su amortización y siempre en función de la intensidad de estas subidas. Puede ser desde unas pocas décimas a varios puntos porcentuales en los intereses que aplican las entidades de crédito a sus clientes. Con lo que repercute en que la masa monetaria que esté en circulación sea menor y en este sentido puede afectar muy seriamente al buen desarrollo del consumo.
Esto en la práctica quiere decir que cuando hay una subida de tipos de interés los bancos rápidamente revisan sus condiciones de contratación. Elevando los tipos de interés de sus productos y en algunos casos también en las comisiones y otros gastos en su gestión o mantenimiento. Desde este punto de vista, esta actuación monetaria no es muy favorable para los intereses reales de los consumidores que verán como tendrán que dedicar más recursos monetarios en la formalización de cualquier línea de crédito.
Repercusión en los mercados financieros
En mayor o menor medida estas actuaciones monetarias tendrán una repercusión en los mercados de renta variable de todo el mundo. Y desde luego que no es positiva, tal y como se ha podido comprobare en estos días tras la nueva subida de tipos por parte de la Reserva Federal de los Estados Unidos. Porque las bolsas reciben esta medida con amplias bajadas en las cotizaciones de los valores que cotizan en los mercados financieros. Con una intensidad que a veces es muy acusada y puede que también exagerada. Pero esta es la ley que impera entre los inversores de todo el mundo.
Mientras que por el contrario, un alza en los tipos es recibida de distinta manera por los mercados de renta fija que son los grandes beneficiados de esta medida. En cualquier caso, habrá que estar muy atentos a toda esta clase de movimientos con la finalidad de revisar nuestra cartera de inversión o de valores. Y si es necesario variarla en función de estos cambios en la política monetaria de los gobiernos. Porque no puede olvidarse que pueden producirse fuertes desajustes en los mismos. Tal y como te habrá pasado en más de una ocasión con tus propias inversiones.
Beneficio para el ahorro
Por tanto, uno de los grandes beneficiados por la medida de subir los tipos de interés serán sin lugar a dudas los ahorradores. Por una razón muy sencilla de explicar y que se basa en que todos los productos destinados al ahorro suben en el rendimiento que ofrecen a sus titulares. Como por ejemplo, en las imposiciones bancarias a plazo fijo, pagarés corporativos o incluso en las cuentas de alta rendimiento o más convencionales. Su efecto más inmediato que es su interés subirá con total rapidez en proporción a las alzas experimentadas.
Esto ayudará a que los particulares tengan más liquides en su cuenta de ahorro y repercute beneficiosamente en la potenciación del consumo por encima de otras consideraciones técnicas. Los depósitos a plazo pueden subir perfectamente en este escenario de aplicar un interés medio y anual del 1 % al 1,50 % o en proporciones muy parecidas. Por tanto, el dinero se desplaza hacia la renta fija en detrimento de la renta variable. Se produce pues un trasvase de flujo monetario entre ambos activos financieros que es muy interesante estudiar y analizar en otros artículos más específicos sobre esta tendencia en el mundo del dinero.
Fortalecimiento de la divisa
Otro de los efectos más positivos de la elevación de los tipos de interés es que se genera una potenciación de la divisa afectada. En este sentido, no puede olvidarse que tras la decisión de la Reserva Federal de los Estados Unidos de elevar sus tipos de interés se ha producido inmediatamente un fortalecimiento de su divisa. Es decir, y para que lo entiendas mejor a partir de estos momentos, el dólar aumentará su cotización. Esto afectará a su capacidad de exportar, ya que comprar bienes estadounidenses será más caro a partir de estos precisos momentos.
Por otra parte, es muy conveniente revisar sobre un aspecto que implica esta importante medida monetaria y es la relacionada con las operaciones realizadas en los mercados de divisas. Ya que en función de su aplicación se puede rentabilizar los ahorros en dependencia de las divisas que se potencian con este nuevo estado monetario. Es una estrategia muy original que vienen desarrollando los pequeños y medianos inversores con mayor experiencia en esta clase de operaciones tan especiales. No en vano, ofrecen una rentabilidad muy alta en comparación con otros activos financieros de especial relevancia.
Tipo de interés en la zona euro
Por lo que respecta a la zona euro la situación por el momento, es sustancialmente diferente a la americana. Esto es debido a que la situación económica es diferente y en este sentido desde el departamento de análisis apuntan a que “en cualquier caso, permanecen en niveles altos, que permiten confiar en la continuidad del ciclo expansivo. Nuestra previsión de crecimiento para 2018 se sitúa ahora en +2,0 % frente a +2,1 % anterior, y +1,8 % en 2019 frente a 1,9 % anterior”.
Por otra parte, consideran que “no esperamos que el BCE cambie su hoja de ruta. La compra de activos (15.000 millones de euros/mes) llegará a su fin en diciembre. A pesar del fin del QE, la política monetaria seguirá siendo acomodaticia, a través de la reinversión de los vencimientos y el forward guidance sobre los tipos de interés”. No en vano, ofrecen una rentabilidad muy alta en comparación con otros activos financieros de especial relevancia.
Es decir, que es un escenario al que todavía le queda mucho recorrido ya que opinan que “los tipos de interés, pensamos que la primera subida podría ser en septiembre/octubre en el tipo de depósito, desde el -0,4 % actual. Draghi termina su mandato en octubre y dejaría de este modo preparado el camino hacia la normalización en tipos”. Algo que sin lugar a dudas afectará a buena parte de los pequeños y medianos inversores que estarán muy pendientes de lo que pueda suceder en la política comunitaria con el objeto de desarrollar alguna clase de estrategias para mejorar sus inversiones.