Es habitual que durante estos días te plantees que es lo que debes hacer con tus ahorros en los próximos años. Y una las opciones que siempre saldrá a relucir es la que tiene a la bolsa como primer referente en tus actuaciones. No en vano, desde varias fuentes de información te están indicando que no este año no será muy bueno para esta clase de operaciones. Pero por el contrario, tampoco faltan las opiniones que van en sentido contrario. Ante este escenario no tendrás más remedio que definirte muy rápido. En uno u otro sentido y trates de rentabilizar tus ahorros de la mejor manera posible. Algo que por otra parte no será nada sencillo.
Para que tus decisiones se planteen con mayor fuerza te vamos a exponer algunas de las razones que pueden inclinar la balanza a la compra y venta de acciones en bolsa. Si bien no debes seguirlas con una total rotundidad, sí que al menos te darán alguna que otra señal sobre cómo deberás ser tus actuaciones durante los meses que tienes por delante. Sabiendo en todo momento que la evolución de la bolsa no será uniforme durante todo el año. Si no que por el contrario se moverá bajo unas cautas de constates cambios. Algo que puedes aprovechar para ajustar tus operaciones a partir de estos momentos.
En cualquier caso, hay una cosa segura que no debes olvidar y que la bolsa es el instrumento financiero que dará más rentabilidad durante el ejercicio 2018. Siempre que su tendencia sea al menos moderadamente alcista. En todos los casos, por encima de las generada por los diferentes productos bancarios o incluso los procedentes de otros segmentos de la renta fija. En donde, en de los casos en no superará los niveles entorno al 1,50 % en el tipo de intereses. Como por ejemplo, en imposiciones a plazo fijo, pagarés, cuentas de alta remuneración o incluso los bonos gubernamentales.
Razones para decir sí a la bolsa
La primera de ellas se basa fundamentalmente en que es un producto financiero que es muy comprensible para buena parte de los usuarios. No necesita de una especial cultura financiera y lo que es más importante: está adaptado a todos los perfiles que presentan los pequeños y medianos inversores. Como es en tu propio caso. Razón más que suficiente como para no rechazar esta clase de operaciones en los mercados financieros. Al menos durante este año que puede que siga la tendencia de los anteriores.
No hay otra opción para ganar más
No hay motivo más contundente paran elegir este mercado de la renta variable que el hecho que es la alternativa más rentable que hay en estos precisos momentos. El único riesgo que tienes es que se genere en estos meses un cambio de tendencia que lleve al traste tus previsiones. Por poco que suban sus índices bursátiles siempre serán más competitivos que los restantes productos financieros. Incluso no es necesario que tengas posiciones abiertas durante todos los meses. No en vano, las puedes rentabilizar en pocos días, semanas o incluso meses. Sí es así habrás cubierto tus previsiones para todo el ejercicio.
En este sentido, con claramente mayoritarios los agentes financieros que opinan que es mejor inclinarse por la renta variable que por la fija. Merece la pena arriesgar un poco más en las posiciones a cambio de mejorar el rendimiento en tus movimientos hasta el mes de noviembre. El retorno medio de la bolsa durante los últimos cinco años se ha acercado a niveles de entre el 10 % y 15 %. Aunque todo parece indicar que este año no será así, si no que por el contrario le puede costar más alcanzar niveles del 10 %. Para el índice selectivo bursátil español, el Ibex 35, los objetivos por parte de los grupos de análisis lo estiman en los 11.000 puntos aproximadamente.
Sin alternativas en la inversión
Uno de los motivos más contundentes para decantarte por la bolsa en estos momentos es la falta de opciones. No en vano, los tradicionales productos bancarios no llegan más que a ofrecer unas cuantas decimas como recompensa a los ahorros. Por otra parte, tampoco es un buen momento para la renta fija ya que ha tiene descontada buena parte de su potencial de crecimiento. En algunos casos incluso sin posibilidades para mejorar sus posiciones. Como consecuencia de este escenario tan claro, no tendrás dudas para llegar a la conclusión que la mejor idea para rentabilizar tus ahorros está representada por una toma de posiciones en los mercados bursátiles. Al menos durante este año que tienes por delante. Aunque esta propuesta puedes formalizarla a través de diversos productos financieros, incluso desde diferentes estrategias en la inversión.
Adaptado a cualquier permanencia
Un de las ventajas que te aporta la inversión en bolsa es que puedes adaptarlo a todos los plazos que desees y sin ningún exclusión. Desde los periodos más cortos a los que exigen los plazos más exigentes. Siempre en función de tus necesidades y de las estrategias que apliques para rentabilizar tus aportaciones monetarias. Este factor te da mayor flexibilidad a las operaciones que vayas realizando en cualquier momento. Hasta el punto de que te podrás amoldar a todas las situaciones que se vayan generando en los mercados financieros. Con mayores garantías de realizarlas con éxito desde el principio.
Acceso a innumerables mercados
La compra y venta de acciones en los mercados de renta variable no cabe duda que te permitirá que tu dinero pueda dirigirse a cualquier zona geográfica. No solamente las más cercanas, sino algunas que hasta hace poco las veías como imposibles de acceder. Como por ejemplo, los mercados asiáticos o incluso de la Ámérica Latina. Las posibilidades de expansión no tienen límites tal y como ocurre en otros productos financieros. Todo ello desde un mismo modelo de inversión y con la misma mecánica en las operaciones. Es algo que algo que agradecerás enormemente para defender tus intereses como pequeño y mediano inversor.
Puedes operar por poco dinero
Si por algo se caracterizan las operaciones en renta variable es porque las puedes formalizar desde muy poca cantidad. Prácticamente desde muy pocos euros y hasta el importe que tú mismo desees. No hay requerimientos mínimos para abrir operaciones en los mercados financieros. Aunque es cierto que a medida que sea más amplias las operaciones también serán las ganancias que puedas obtener en cada una de las operaciones que hayas suscrito hasta esos momentos. En ningún caso, el importe será un problema para que puedas invertir en bolsa a partir de estos momentos. Se trata de una modalidad que muy asequible para todas las economías domésticas.
Puedes personalizar las operaciones
Desde luego que una de las ventajas de la compra y venta de acciones en la bolsa es que podrás amoldarte todas las situaciones. Es decir, no tendrás que limitarte a ningún planteamiento. Si no que por el contrario, tendrás una completa libertad para adaptarte a todas las circunstancias que te generen los mercados financieros. En operaciones de pequeña cuantía o por el contrario de una gran exigencia económica. Nadie te impedirá el dinero que deseas gastarte para invertir tu dinero en los mercados de renta variable. No puedes olvidar que puedes abrir posiciones en la bolsa desde un solo euro. En pocos productos financieros podrás disponer de esta liberta para tomar posiciones en algún activo financiero.
Cuentas con muchos apoyos
Uno de los beneficios de la compra y venta de acciones en la bolsa es que dispondrás de muchas herramientas de apoyo para abrir las posiciones en los mercados financieros. Incluso con una amplia información en los medios de comunicación especializados y digitales. En donde hasta te pueden indicar cuáles son los niveles de entrada y salida en tus operaciones. Algo que por otra parte no se produce en otros productos financieros más especializados. De cualquier forma, no puedes olvidar que la bolsa es muy sencilla para seguirla todos los días. Y de esta manera, sepas en todo momento cuál es el verdadero real de tus inversiones. En este sentido, no tendrás ningún momento para conseguir un seguimiento más eficaz para controlar todos los movimientos realizados.
Ofrece mayor rentabilidad
Tampoco puedes olvidar que en pocos productos financieros podrás obtener el rendimiento de las operaciones en los mercados de renta variable. Hasta el punto que llegarás a la conclusión que no dispones de otras alternativas para rentabilizar tus operaciones. Además, no te exigirán demasiados conocimientos sobre cultura financiera, como por otra parte sucede con derivados, warrants o futuros. Los requerimientos para invertir en bolsa son muy asequibles para casi todos los pequeños y medianos inversores. No en vano, la inversión en bolsa es considerada como eminentemente popular porque está abierta a un gran número de usuarios.
Por otra parte, esta clase de inversión la tienes dispuesta desde cualquier entidad financiera. Incluso la puedes formalizar cómodamente desde tu ordenador personal al incentivarse desde los formatos online. Sin que tengas que desplazarte ninguna sucursal bancaria. Con tarifas que cada vez son más asequibles para los usuarios. Hasta el punto que por 15 euros puedes realizar las operaciones de compra y venta. Con la aparición de ofertas y promociones que abaratan los precios para suscribir este producto financiero tan popular.