Préstamos de gran cuantía, ¿qué importes puedes demandar?

Los créditos con importes máximos del mercado bancario

La actual oferta crediticia pasa por ofrecer vías de financiación no excesivamente elevadas que se materializa por la concesión de una amplia variedad de créditos. Desarrollados bajo diferentes estrategias comerciales en cuanto a sus importes, pero que en cualquier caso están al alcance de casi todos los usuarios bancarios, incluyéndote a ti. Pero qué pasa cuando las necesidades de financiación son más exigentes y se requiere de unos importes mucho más elevados.

El escenario cambio sensiblemente, y las propuestas que ofrecen las entidades bancarias se restringen enormemente en sus importes, acotando las propuestas. Y a ello se le une el endurecimiento en las condiciones de contratación. Puede que ya no baste con aportar cualquier nómina, sino que incluso sea necesaria la presencia de un avalista, y hasta te veas en la obligación de presentar una cuenta corriente muy saneada. De cualquier manera, los requerimientos serán más exigentes, y probablemente no puedas cumplirlos en muchas de las propuestas.

Puede que te llegue una situación puntual en que necesites una cantidad más alta de lo habitual. Por diferentes motivos, para atender alguna urgencia que se te presente en cualquier momento, o ante la necesidad de afrontar alguna operación de cierta importancia. No te servirán los préstamos que conceden 5.000, 10.000 o hasta 20.000 euros. Necesitarás importes más altos, entre 50.000 y 100.000 euros. Tu primera reacción será comprobar como la oferta bancaria se reduce notablemente, más de lo podías creer al principio.

Importes de hasta 100.000 euros

Ahora solamente encontrarás una par de propuestas, no muchas si tú demanda se desenvuelve bajo estos márgenes de exigencia. Se desarrollan bajo concesiones que tienen un tope máximo en los 100.000 euros. Es cierto que no tendrás mucho en donde elegir, pero al menos dispondrás de alguna que otra línea de crédito con estas características.

Otra de las cosas que te llamará la atención es el endurecimiento de las condiciones. Serán muy fuertes, con varios requerimientos para que te acepten la solicitud. Se convertirá, con toda seguridad, en el principal obstáculo para la concesión de los importes más elevados.

Esta clase de créditos de mayor cuantía se comercializan bajo unas constantes comerciales muy claras. No todos los demandantes podrán conseguir su objetivo, y en muchas ocasiones no tendrán más remedio que buscar otras soluciones alternativas (familiares, créditos entre particulares, anticipos de nómina, etc.). Aunque lo más probable es que al final no puedan satisfacer esta demanda tan exigente. A no ser – claro está – que seas un crédito preferente y tengas vía libre a esta clase de financiación.

La primera incertidumbre que albergarás desde el principio es si puedes acceder a estos préstamos. Para lo cual deberás aportar varios requisitos en tu candidatura. Como consecuencia de ello, deberás conocer con anticipación lo que te pedirán en el banco para que formalices la operación. Si los cumples, enhorabuena, porque tendrás abiertas las puertas a uno de los créditos más exclusivos que presentan las entidades financieras en estos precisos momentos.

¿Qué te pedirán los bancos?

Los requisitos que te impondrán desde los bancos

Primeramente deberás tener claro que las condiciones actualmente son mucho más exigentes que hace unos años, tras la crisis económica iniciada en 2008. No en vano, los bancos no quieren que se incrementen el número de morosos, y deberán tener la certeza que puedas cumplir con su devolución. Ni más ni menos. Si no reúnes los requisitos deberás despedirte de su concesión con toda seguridad.

En primer lugar te exigirán una nómina de cierta relevancia, generalmente a partir de 2.000 euros. A ser posible procedente de un contrato laboral fijo o indefinido. Pero no será la única condición, deberás presentar un historial bancario impecable, y por supuesto que no estés integrado en ninguna lista de morosos (RAI, ASNEF, etc.).

Si tienes contratados otros créditos, aunque sean en otras entidades bancarias, también será un factor determinante para su concesión. Siendo prioritario que estés libre de estas cargas. Otro aspecto de vital importancia en el proceso provendrá de los productos suscritos con la entidad, ya que una mayor vinculación te ayudará en el proceso de concesión del préstamo.

Y finalmente, incluso te exijan la presencia de un avalista para que respalde la operación bancaria. Normalmente procederá de tu entorno familiar más cercano, o cuando menos de tu círculo de amigos más próximos. Ya que la firma del contrato os afectará a ambas partes, de ahí la precaución que deberá tomar la otra parte. No en vano, es mucho dinero el que está en juego, puede que hasta 100.000 euros.

¿A qué créditos puedes acceder?

¿Quieres saber como son los créditos a los que puedes acceder?

Desde luego no lo tendrás nada fácil, ya que las propuestas bancarias estarán seriamente limitadas por el alto límite impuesto. Enfrentándote a líneas de crédito que oscilan en una franja que va de 60.000 a 100.000 euros. Y que están comercializadas bajo unas señas de identidad comunes a todas ellas, siendo en cualquier vaso inconfundibles.

Se mueven, eso sí, con plazos de devolución muy flexibles, que van desde únicamente 6 meses a un máximo de 8 años. Incluso con la posibilidad de formalizarlo cómodamente desde casa a través de sus formatos online, y puedas ahorrarte unas cuentas décimas en los tipos de interés en la operación suscrita.

Por fin llegará el momento crucial de comprobar el tipo de interés que te aplicaran los bancos cuando te lo concedan. Dispondrás de una media en torno al 9% o 11%, y a lo que puede añadirse las posibles comisiones que te incorporen en el crédito. Las más habituales son las que se refieren a la apertura, estudio y compensación de reembolso anticipado, que supondrá entre un 0,50% y 2% sobre el importe demandado.

Las mejores líneas de crédito

A partir de estas características ya solamente te faltará seleccionar el modelo más apto a tus necesidades personales de financiación. La más generosa, sin duda, es la que te ofrece en estos momentos Banco Pichincha. Ofrece hasta 100.000 euros en cada demanda, con un tipo de interés muy competitivo del 7,50%, y un plazo de amortización máximo de 8 años. No obstante, tendrás que aportar tu nómina para que sea aceptada la solicitud. Si no es así, los tipos se elevarán sustancialmente.

Otra alternativa que dispones para alcanzar estas cantidades tan amplias es la que desarrolla Bankinter bajo su Préstamo Personal. Concede hasta 90.000 euros, con una devolución desde los 6 meses. Banco Santander, por su parte, se mueve también con estos márgenes comerciales, contando con una línea de crédito estipulada en 60.000 euros. Y con un período de devolución más extenso, que se eleva hasta los 8 años.

Bankia, por último, ha confeccionado otra propuesta similar para estos casos tan especiales, y que se ha materializado en la aparición del denominado Crédito Súper. Proporciona similares importes con respecto a las anteriores propuestas, aunque como novedad aporta la singularidad que su formalización es exclusivamente en formato online. Dando mayor agilidad a la operación,

Características de estos préstamos

Las características que presentan estos préstamos

Al tratarse de unas vías de financiación más expansivas presentan unos rasgos comerciales que se diferencian de otras propuestas menos exigentes. Y que deberás tener en cuenta cuando formalices el contrato de alguno de estos productos bancarios.

Tratando, en todo momento, de conseguir un mayor ahorro en su contratación a través del modelo más competitivo, pero también eliminado el mayor número de gasto. Y que básicamente se centrarán en las siguientes líneas de actuación que te exponemos a continuación.

  • Deberás buscar aquel diseño de financiación que esté confeccionado bajo el tipo de interés más competitivo, y que a través de las ofertas que presentan los bancos puedes rebajarlo sensiblemente por debajo de la barrera del 10% por medio de ciertas propuestas.
  • Dispondrás de promociones muy favorables para tus intereses, pero seguramente a cambio que domicilies tu nómina o ingresos regulares. Será el requisito más exigente que deberás abordar para enfrentarte al proceso de solicitud, y en cualquier caso por encima de otros.
  • Para eliminar más gastos, no te quedará más remedio que inclinarte por los créditos que estén exentos de cualquier clase de comisión y gastos en su gestión. No en vano, te ahorrarás muchos euros en la operación, que te ayudarán a mantener con mayor liquidez tu cuenta corriente.
  • La mejor manera para adaptarte a tus necesidades particulares será elegir el modelo que incluya el período de amortización más flexible. Podrás amortizarlo rápidamente, pero si no puedes afrontar cuotas mensuales muy elevadas, como alternativa optarás por plazos más extensos.
  • Será completamente imprescindible que demandes los importes que realmente necesitas, ni más ni menos, y nunca por encima de tus necesidades reales de financiación. No en vano, podrá repercutir en un incremento excesivo en el nivel de endeudamiento, que quizás no puedas asumir.
  • A diferencia de otras propuestas en los créditos desarrollados por las entidades financieros, no ofrecen períodos de carencia, que te puedan servir para afrontar este proceso en mejores posiciones su devolución, sobre todo al principio.
  • Seguramente que tengas alguna propuesta que esté vinculada a la contratación de otros productos bancarios (planes de pensión, seguros, fondos de inversión, etc.), como fórmula para disminuir los tipos de interés que te aplicarán en el crédito. Puede incluso llegar hasta dos puntos porcentuales sobre el planteamiento inicial.
  • La falta de propuestas en esta clase de financiación te impedirá seguramente que consigas un diseño más beneficioso para tus intereses, y con mejoras en su comercialización. Las ofertas que desarrollan los bancos se mueven bajo similares planteamientos comerciales.
  • Y por último, no estará de más que tengas en cuenta que los requisitos serán muchos más exigentes, y probablemente no puadas cumplirlos. Y como consecuencia de ello, tengas que renunciar – para tu desgracia – a esta línea de crédito tan especial.

 

 

 

 

 

 


Sé el primero en comentar

Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

*

  1. Responsable de los datos: Miguel Ángel Gatón
  2. Finalidad de los datos: Controlar el SPAM, gestión de comentarios.
  3. Legitimación: Tu consentimiento
  4. Comunicación de los datos: No se comunicarán los datos a terceros salvo por obligación legal.
  5. Almacenamiento de los datos: Base de datos alojada en Occentus Networks (UE)
  6. Derechos: En cualquier momento puedes limitar, recuperar y borrar tu información.